Un lienzo azul salpicado de mil formas, texturas y tonos, un
punto de fuga en nuestra vida que nos lleva más allá de la realidad, arte en
estado puro.
¿Cómo se forman las nubes? La primera clave es simple: aíre
con cierto grado de humedad que se enfría y al enfriarse la humedad que
contiene se condensa, apareciendo la nube. Pero para que se condense una gota necesita de algún "estrato" donde hacerlo, normalmente es una mota de polvo, pero últimamente se ha considerado que pudiera ser que utilizan partículas solares llegadas del espacio. Así estamos, sin tener claro cosas tan básicas como esta, pero sigamos.
¿Cómo ocurre esto, cómo se enfría el aire?…. de varias
formas. Cuando el viento se encuentra con una montaña se ve obligado
a ascender y contra más sube, más se enfría, estas son las nubes orográficas y
se le denomina efecto Foehn.
El efecto Foehn en el coll de lilla (Tarragona)
El efecto Foehn tiene importantes implicaciones, a veces espectaculares. Si las nubes se forman al ascender el aire y descargan en forma de lluvia la humedad contenida en él cuando pasa a la otra vertiente el aire ya no contiene humedad, por lo que en la otra vertiente llueve mucho menos. Además por cuestiones físicas el aire se calienta más al bajar de lo que se enfrió al subir. Así que al cruzar a la otra vertiente el aire no solo contiene menos humedad sino , que además está más caliente. Contra más alta es la montaña más intensidad tiene el fenómeno y más marcadas las consecuencias. De esta manera muchos de los grandes desiertos se encuentran a sotavento de grandes cordilleras, como el del Gobi, el valle de la Muerte en California y más cercano a nosotros la árida estepa del valle del Ebro.
En otras ocasiones choca un frente cálido con uno frío y al ser menos denso asciende enfriándose, condensando la humedad y generando las nubes convectivas.
Y por último también se forman nubes bajas tras la lluvia y
sin la presencia de viento, son las nubes de evaporación.
Y si el aire se enfría al ascender, por norma, en otras ocasiones se enfría al descender. Cuando no se mueve el viento el aire frío, que pesa más que el cálido, se cae al fondo de un valle y genera la niebla, que no deja de ser una nube aunque a ras de suelo. Esto es la inversión térmica. Así que si nos encontramos en pleno invierno y tenemos una tarde esplendida, cielo despejado, sol, calorcita, esa madrugada o vamos a tener una helada o niebla, esto depende de las condiciones y de la zona en la que nos encontremos, pero la niebla solo, o casi, la encontraremos en grandes valles como el del Ebro, Tajo, Duero,...
Una masa de aire sobre una gran extensión de agua que se encuentra más fría también genera niebla, esta es la niebla de advección.
Otras veces es al contacto con un suelo frío que suele ocurrir en invierno con noches despejadas y escarcha o hielo, es la niebla de irradiación.
Ya tenemos los tres tipos de nubes: orográficas, convectivas y la niebla.
La primera y la última son muy reconocibles y más o menos
siempre iguales, pero las convectivas son un poco más complicadas.
La altitud y las condiciones en las que se generan dan lugar
a una fauna de nubes con sus especies, géneros y variedades… que se complica
con que muchas son el final o el principio de otras….
Pero hay unas normas de las que podemos partir, la primera
la altitud a la que aparecen
En primer lugar las nubes pueden ser bajas de 0 a 3.000
metros.
Medias entre 3.000 y 6.000
Y altas más de 6.000
Las nubes de tormenta, los cumulonimbos, cruzan todas las
alturas.
Las diferencias de humedad, temperatura, radiación, etc. entre estas distintas alturas marcan la formación de las nubes y lo que podamos ver en el cielo.
A veces en los grandes valles la niebla no está pegada al
suelo si no unos cientos de metros por encima y se puede ver en invierno. El
cielo se torna plomizo y uniforme, sin ninguna variación de tonos.
Los cúmulos asemejan algodones o cordericos y el dicho popular dice que “nubes a cordericos agua a capacicos”, aunque no siempre se cumpla.
Los cumulus fractus son pequeños, muy cambiantes y parecen
algodones de feria, deshilachados y sin formas claras y en constante cambio.
Los cúmulus humilis son fractus evolucionados, sus formas están muy delimitadas, son más largos que altos y con la base algo oscura.
Si siguen evolucionando se convierten en mediocris, los reconocemos porque su altura es similar a su largura
El siguiente paso en su evolución es convertirse en cumulus congestus y llaman la atención porque su altura es mucho mayor que su largura, pueden traer pequeños chaparrones y acabar evolucionando a una nube de tormenta.
Estas nubes de tormenta llegan a tener miles de metros de altura y traen las fuertes tormentas. Cuando muestran la parte alta redondeada es que todavía están creciendo y se les denomina cumulonimbus calvus.
A veces muestran pequeñas estructuras que asemejan velos, a veces cubriendo la parte alta se les denomina pileus, otras solo una pequeña parte y se les denomina velum.
Estas tormentas son caprichosas, aunque los físicos darán otra explicación, unas veces van acompañadas de rayos y truenos que parece que el mundo se nos viene encima...
Otras en cambio vienen acompañadas de rayos... pero no de truenos.
Llega un momento que el crecimiento del cumulonimbo se detiene al topar con un estrato de temperatura distinta y empieza a aplanarse y la parte alta muestra como filamentos entonces se llaman cumulonimbus capillatus, cuando adquiere una clara forma de yunque se llama cumulonimbus capillatus incus.
Cuando los cúmulos aparecen formando una capa extensa se les denomina estratocúmulos, tienen formas muy definidas y poca altura.
En raras ocasiones en la base de las nubes de tormenta aparecen protuberancias muy llamativas, son los mammatocúmulos.
Los nimbostratos a diferencia de los estratocúmulos no poseen formas definidas y tienen mucha más altura, a menudo cubren el cielo y traen lluvia aunque no muy intensa.
Las nubes medias se dividen en tres tipos.
Los altostratos son una capa tan fina que se puede ver el
sol a través de ella .
Los altocúmulos son cúmulos pero más altos y que ocupan grandes extensiones. No traen lluvia.
Pueden ser lenticularis, estos aparecen con fuerte viento en las alturas y adoptan diversas formas: un puro, un plato, una pila de platos...
Los altocúmulus floccus son pequeños algodones con muy poco desarrollo vertical, casi planos y cuando crecen en altura se les denomina castellatus.
Cuando la capa es amplia y apenas se ve el cielo son altocúmulos stratiformis.
Y cuando se adivinan líneas que ondulan son stratiformis ondulatus.
Los nimbostratos se parecen a los cúmulos pero con formas menos definidas y compactas, suelen venir acompañados de lluvia.
Las nubes altas están formadas por pequeños cristales de hielo y son muy poco densas, casi transparentes y difuminan el sol sin ocultarlo, son los cirrus.
Tenemos los cirrus fibratus asemejan fibras con espacios
entre ellas por los que se ve el cielo.
Cirrus spissatus tiene un corazón más denso.
Cirrus radiatus son líneas de
pequeñas nubes que convergen en el horizonte.
Los cirrus uncinus son líneas que se doblan hacía un lado en su extremo.
Los cirrostratos son como los altostratos pero mucho más
altos.
Los cirrocúmulos son como estratos de cúmulos a una gran altitud.
Un fuego forestal es espectacular pero mientras miramos el fuego y la inmensa nube de humo que asciende no caemos en la cuenta que sobre la nube de humo se forma una de verdad. La ascensión del aire hiper caliente generado por el fuego se enfría rápido formando una nube similar a un cúmulo, son los pirocúmulos.
Grandes chimeneas de centros industriales también generan pequeñas nubes pero las estelas de los aviones trenzan en el cielo tras su paso.
El mundo de las nubes es algo más complicado que lo expuesto aquí, pero al menos ya tenéis algo con lo que comenzar, disfrutar de nuestro cielo, es gratis, agradable, nos inspira...
